Preaviso por despido disciplinario

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En este artículo vamos a hablar sobre un aspecto importante del despido disciplinario: el preaviso. Si eres un trabajador que se encuentra en una situación laboral complicada, es importante que conozcas tus derechos y obligaciones en cuanto al preaviso de despido disciplinario.

En este artículo, redactado con el temario impartido en el Executive MBA online de la prestigiosa EAE Business School, te contamos en qué casos es necesario un preaviso y qué requisitos legales debemos cumplir ante un despido disciplinario.

Antes de empezar, es importante aclarar que el preaviso de despido disciplinario no siempre es necesario. En algunos casos, la gravedad de los hechos que han llevado al despido puede hacer que el preaviso no sea necesario. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el empleador debe dar al trabajador un preaviso antes de proceder al despido disciplinario.
 

El preaviso de despido disciplinario

El preaviso de despido disciplinario consiste en una comunicación previa al trabajador en la que se le informa de que su contrato de trabajo va a ser extinguido. El preaviso puede tener diferentes duraciones en función de la antigüedad del trabajador en la empresa y de lo que establezca el convenio colectivo aplicable. En general, la duración mínima del preaviso es de quince días naturales.

El preaviso de despido disciplinario tiene como objetivo garantizar el derecho del trabajador a una defensa efectiva de sus intereses laborales. Al ser informado con antelación del despido, el trabajador tiene tiempo para preparar su defensa y para buscar alternativas laborales.

Ahora bien, ¿qué sucede si el empleador no cumple con la obligación de hacer el preaviso por despido disciplinario al trabajador antes de proceder al despido disciplinario? En ese caso, el trabajador tendrá derecho a una indemnización por falta de preaviso, aunque en algunos tipos de infracción grave, el preaviso está exento.

 


Un despido sin preaviso

Si bien es cierto que el preaviso de despido disciplinario es una obligación del empleador, también es importante destacar que existen algunas situaciones en las que no es necesario preavisar al trabajador antes de proceder al despido: cuando se aplique una causa legal o se considere que el incumplimiento del trabajador es de tal gravedad que justifica la extinción inmediata del contrato de trabajo.

  • Faltas muy graves: En caso de que el trabajador haya cometido una falta muy grave, como el acoso sexual o el acoso por razón de género, el preaviso de despido disciplinario no será necesario.
  • Actos delictivos: Si el trabajador ha cometido un acto delictivo, como el robo o la estafa, la empresa puede proceder al despido disciplinario sin necesidad de preaviso.
  • Abandono del trabajo: Si el trabajador abandona su puesto de trabajo sin causa justificada y no se presenta a trabajar durante varios días, la empresa puede proceder al despido disciplinario sin necesidad de preaviso.
  • Negativa a trabajar: Si el trabajador se niega a realizar las tareas asignadas sin causa justificada, la empresa no está obligada a dar el preaviso de despido disciplinario.

 

Otros requisitos legales del preaviso de despido disciplinario

El preaviso de despido disciplinario es un trámite que puede tener implicaciones legales si no se realiza como se debe, ya que es una obligación del empleado que tiene como objetivo proteger los derechos laborales del trabajador.

La empresa debe comunicar por escrito al trabajador la decisión de extinguir el contrato dentro de los plazos establecidos por la ley y comunicar al trabajador de manera escrita y fehaciente las causas que motivaron el despido, así como entregar esta notificación en mano, o bien enviarla por correo certificado con acuse de recibo.

Durante el periodo de preaviso de despido disciplinario, el trabajador sigue en situación de alta en la Seguridad Social y sigue recibiendo su salario, aunque puede ser relevado de sus funciones, asimismo, la empresa debe permitir al trabajador el acceso a su puesto de trabajo y a los recursos necesarios para llevar a cabo sus tareas.

Si la empresa no cumple con el plazo de preaviso de despido disciplinario establecido, puede ser sancionada por incumplimiento de las obligaciones laborales.

Si el trabajador considera que el despido es improcedente, puede impugnarlo ante la jurisdicción social. En este caso, la empresa deberá demostrar que el despido fue justificado y que cumplió con los plazos y procedimientos legales establecidos, incluyendo el preaviso por despido disciplinario.

El preaviso puede ser objeto de negociación entre la empresa y el trabajador. Por ejemplo, la empresa puede ofrecer una compensación económica al trabajador a cambio de una reducción en el plazo de preaviso de despido disciplinario, del mismo modo, el trabajador también puede renunciar al periodo de preaviso de despido disciplinario si lo desea y llegar a un acuerdo con la empresa para que el despido sea efectivo de forma inmediata.

 

 

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Plazos de preaviso de despido disciplinario

Los plazos establecidos por la ley para el preaviso de despido disciplinario varían según el tipo de contrato y la antigüedad del trabajador en la empresa. En general, el plazo mínimo de preaviso para el despido disciplinario es de 15 días, aunque este plazo puede ser mayor dependiendo del contrato y la antigüedad del trabajador.

En el caso de contratos indefinidos, el preaviso de despido disciplinario debe ser de 15 días. En los contratos temporales, el preaviso de despido disciplinario se calcula en función de la duración del contrato, siendo de un día por cada mes trabajado con un máximo de 12 días.

Es importante que el empleador cumpla con los plazos y los requisitos legales establecidos en el preaviso de despido disciplinario, ya que de lo contrario podría ser considerado un despido improcedente. En este caso, el trabajador tendría derecho a una indemnización por despido improcedente, que suele ser mayor que la indemnización por despido disciplinario.

Además de los aspectos mencionados anteriormente, es importante destacar que el preaviso de despido disciplinario también puede tener implicaciones en la reputación de la empresa. Un despido disciplinario puede generar un clima de tensión y desconfianza entre los demás trabajadores, lo que puede afectar negativamente el ambiente laboral y la productividad de la empresa. Por ello, es importante que el empleador actúe de manera justa y equitativa y que siempre tenga en cuenta los derechos laborales de sus trabajadores.

 

Conclusión

En definitiva, el preaviso de despido disciplinario es un aspecto importante que debe ser tenido en cuenta tanto por el empleador como por el trabajador. Cumplir con las obligaciones legales y respetar los derechos laborales de los trabajadores son elementos fundamentales para garantizar un ambiente laboral justo y productivo.

 

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