Cómo crear un plan de contenidos para redes sociales

Hoy en día, el Marketing de contenidos es una de las estrategias más efectivas. Aunque no sirve de nada si no se cuenta con un plan que te ayude a conseguir tus objetivos. En este post te contaremos cómo crear un plan de contenidos en sencillos pasos.

Qué es un plan de contenidos

Un plan de contenidos es un documento que sirve como guía para saber qué contenido se tiene que publicar por tus canales. De esta forma también se ve el objetivo que se pretende conseguir con esta estrategia.

Se trata de crear y compartir contenido escrito, vídeos e imágenes para que tu audiencia conozca la marca, los servicios o los productos que ofreces. El plan de contenidos se encarga de resolver los problemas de tu audiencia y aporta soluciones oportunas.

Cómo hacer un plan de contenidos en redes sociales

Para llevar a cabo esta estrategia es importante explicar cómo hacerlo y qué pasos hay que seguir para conseguir unos resultados excelentes.

Analizar la situación actual

El primer paso es analizar nuestra situación en el momento en que se inicia el plan. Es importante analizar tu posicionamiento con respecto a la competencia: el número de seguidores y la evolución en cada red social, horario y frecuencia de publicación, los contenidos con más alcance de cada uno de vosotros dos,...

Análisis DAFO

Con este análisis DAFO conoceremos el punto de donde partimos y podremos marcar una estrategia que nos dé resultados más positivos. Por ello, hace falta definir:

• Debilidades: factores internos que limitan tus posibilidades
• Amenazas: factores externos que pueden dificultar tu proyecto para conseguir los objetivos
• Fortalezas: factores internos que la empresa tiene ventaja competitiva y que permitirán superar las amenazas
• Oportunidades: factores externos que aportan a la empresa una ventaja con el resto de competidores del sector

Cuando el análisis DAFO esté realizado, podrás conocer los aspectos básicos más importantes de la empresa y pensar posibles acciones a aportar.

El público al que va dirigido

Es fundamental definir tres o cuatro tipos de públicos para saber cómo poder vender mejor el producto o servicio. Dependiendo de cada tipo de público, se tendrá que usar una estrategia distinta a otra, ya que cada persona tiene sus gustos y preferencias.

Además, también existe la imagen del ‘buyer persona’. Es un término que define a tu cliente ideal de manera más específica que el público objetivo. Es importante no confundirlo con el público objetivo, este es el grupo al que te diriges. Dentro de este grupo encontramos el buyer, que podrían ser uno o varios.

Al definir al ‘buyer persona’ se hará un poco más fácil llegar a él y crear el plan de contenidos conveniente y adecuado.

Definir los objetivos

Para llegar a vender lo valioso es conseguir visibilidad y marcar unos objetivos reales y medibles, entonces ya se podrá trabajar y avanzar en el proyecto. Normalmente, para conseguirlo, se emplea la herramienta de las redes sociales. Por ello, hay que ver qué tipo de contenidos tenemos, cómo vamos a trabajar y sobre todo en qué red social lo haremos.

Es verdad que este punto depende mucho del presupuesto. Dependiendo del presupuesto que se tenga, se podrán desarrollar unas acciones u otras. Al fin y al cabo, se trata de conseguir que los clientes valoren y vean el precio de nuestros servicios para que sea más fácil y productivo trabajar.

Tipos de contenidos para redes sociales

El tipo de contenido más utilizado acostumbran a ser los artículos en el blog que están enlazados con las redes sociales para conseguir más difusión.

Ten en cuenta que cuanto más material distinto ofrezcas, más vas a llamar la atención del cliente y podrás generar ideas para tu plan de contenidos. Eso significa que no hay que basarse solamente en colgar fotografías, también puedes optar por encuestas, tutoriales, casos reales de éxitos, vídeos, podcast, entrevistas, guías, …

Escoger las redes sociales

Cada red social tiene sus propias características y es evidente que no todas ellas comparten el mismo público objetivo. Así que hay que tener en cuenta de qué trata cada una de ellas para decidir con cuál (o cuáles) vas a usar tu plan de contenido:

• Facebook: Funciona muy bien para compartir artículos de tu blog. La frecuencia de publicación dependerá del producto y el objetivo que se haya marcado. Con una media de tres veces por semana sería excelente, aunque puede depender del producto.
• Instagram: la red social más usada actualmente. El contenido es más visual y también se pueden compartir artículos del blog, así se ha demostrado con el tráfico de cualquier web. Además, también mejora tu imagen de marca y engagement.
• Twitter: publicar una media de tres a cinco tweets al día, aumenta el tráfico del blog de manera notable. Por ello, hay que estar publicando diariamente distintos tweets, pero siempre relacionados entre ellos.
• Linkedin: es la mejor herramienta para enriquecer dicho perfil con contenidos que muestran tu experiencia, formación,etc. Este contenido se muestra a gran cantidad de personas y ayuda a posicionar mejor en Google, además, también atrae tráfico al blog.

Por qué usar un plan de contenidos para redes sociales

Es claramente una herramienta fantástica y muy práctica para conseguir más visualización y público para una empresa que pretende darse a conocer con sus productos o servicios. Estas plataformas digitales potencian la presencia de los negocios de cualquier tipo en Internet y están al alcance del empresario.