Cómo y cuándo plantearse un cambio de trabajo

Tomar la decisión de cambiar de empleo, a veces, no resulta sencilla. Algunos talentos se sienten constantemente motivados por la búsqueda de nuevas oportunidades. Otros perfiles, por el contrario, prefieren posponer ese momento si ya están trabajando en una empresa.

Cuándo plantearse un cambio de empleo

La incorporación a un puesto de empleo puede estar impulsada por las circunstancias externas. Aunque una nueva etapa también puede buscarse por decisión propia. ¿Cuándo valorar esta posibilidad? A continuación, hacemos referencia a varias situaciones que se repiten a nivel potencial.

1. Planeas mudarte a otra ciudad

Tus decisiones profesionales se enmarcan en tu proyecto de vida. Tal vez, por motivos personales, hayas tomado la decisión de vivir en un destino que está a kilómetros de distancia del municipio en el que resides actualmente. En ese caso, no puedes desplazarte cada día desde ese lugar hasta la dirección en la que se encuentra la empresa. Y, en consecuencia, debes centrar tu búsqueda activa de empleo en un nuevo contexto. Especialmente, si la opción de seguir colaborando a distancia es inviable.

2. El negocio no atraviesa un buen momento

Imagina que formas parte de una organización que, como consecuencia de los resultados negativos, ya ha despedido a algunos trabajadores. La incertidumbre corporativa afecta de manera directa a quienes forman parte de ese lugar. En este escenario, es probable que te resulte difícil visualizarte en el mismo puesto dentro de unos años. No quedes a la expectativa de aquello que ocurra a nivel potencial. Toma decisiones en tu presente más inmediato porque tú eres el protagonista de tu vida profesional.

3. Cuando has actualizado tu currículum

¿Has ampliado tu formación con un grado, un curso superior o un máster? La búsqueda de otro empleo, en este caso, está alineada con el deseo de encontrar un puesto en el que aplicar todo lo aprendido durante este periodo de aprendizaje.

Eso no significa que esto sea algo que siempre deba ocurrir a modo de causa y efecto, ya que quizá tengas la ocasión de evolucionar en la empresa en la que colaboras. ¿Qué hacer si no existe esta expectativa de crecimiento? Actualiza tu currículum vitae y busca una oportunidad en el sector en el que deseas enfocarte.

4. No eres feliz en la situación actual

Todo ser humano tiene momentos en los que se siente menos motivado con su rutina profesional. En ocasiones, el aburrimiento indica que ha llegado la hora de finalizar una etapa para recorrer otro camino. Quizá ese empleo fue muy importante para ti, pero ahora te sientes estancado.

5. Cuando te surge una oportunidad mejor

Tus circunstancias pueden cambiar cualquier día. Algunas personas prefieren seguir consultando anuncios de empleo aunque estén trabajando. Al presentar una candidatura a una oferta interesante, existe la posibilidad de acceder a una oportunidad que mejore las condiciones de trabajo del actual puesto. Y, en ese caso, al hacer balance de los pros y los contras de esta alternativa, quizá el trabajador tome esta decisión.

Estos son algunos de los casos en los que una persona puede plantearse un cambio de empleo hasta llegar a la jubilación.