Todo lo que necesitas saber sobre la Matriz BGC

Cuando una empresa se plantea lanzar un producto al mercado, es totalmente imprescindible que detrás se encuentre una estrategia que ayude a planificar y decidir cuál debe ser su proyección. Y es que lo importante no es solo saber cuál es la posición que tienen nuestros productos actualmente en el mercado, sino que también hay que tener en cuenta cómo queremos que avancen y qué queremos que nos aporten.

Ante este contexto nace de la mano de la consultora Boston Consulting Group la conocida matriz BGC, que es desde muchas décadas una de las herramientas del mundo empresarial más utilizadas para analizar las carteras de productos.

¿Qué es la Matriz BGC?

La Matriz BGC, conocida también como Matriz de Boston Consulting Group o Matriz de Crecimiento, es una herramienta que se usa en el mundo empresarial y del marketing para analizar estratégicamente la cartera de productos y las unidades estratégicas de negocio de una empresa, con el fin de poder decidir qué productos son las más rentables en una empresa y decidir dónde invertir. Con este método se analiza el negocio, igual que con la matriz DAFO, en base a dos dimensiones:

Porcentaje de crecimiento en el mercado:

Para entenderlo de la forma más simple posible, podemos decir que el porcentaje de crecimiento en el mercado calcula la evolución que tiene la demanda de un producto en el mismo.

Tasa de participación en el mercado:

La tasa de participación en el mercado evalúa nuestra cuota de mercado frente a la de nuestra competencia. En otras palabras, consiste en analizar qué porcentaje de las ventas del mercado es nuestra.

¿Para qué sirve la Matriz de Crecimiento?

La matriz está compuesta por un eje vertical, que representa la tasa de crecimiento de mercado, y el eje horizontal, encargado de representar la cuota de mercado. Su funcionamiento es de lo más sencillo: en función de la situación de cada producto dentro de los cuatro cuadrantes que la componen, se elige una estrategia u otra para llevar a cabo.

Veamos cuáles son los cuatro tipos de productos que podemos encontrar dentro de la matriz:

Producto Estrella

Lo podemos encontrar en el cuadrante superior izquierdo y presenta un alto crecimiento y una elevada participación en el mercado. Hay que prestarles especial atención, ya que generan mucha liquidez y necesitan una inversión constante para poder consolidarse dentro del mercado, para convertirse así en productos maduros.

Producto Vaca

Los productos vaca, que podemos encontrar en el cuadrante inferior izquierdo, son los que se encuentran en fase de madurez y están consolidados en el mercado. Generan gran liquidez para la empresa y casi no necesitan inversión.

Producto Interrogante

Situados en la parte superior derecha de la matriz, los productos interrogantes son aquellos que presentan un elevado crecimiento, pero cuya participación en el mercado es débil. Dicho crecimiento provoca que se necesiten elevadas inversiones pero, por contrapartida, su baja participación hace que a penas generen ingresos. Es necesario reevaluar la estrategia para que este producto no se convierta en producto perro, y pase a ser un producto estrella.

Producto Perro

Son los productos menos recomendados para la empresa y se ubican en el cuadrante inferior derecho. Lo más recomendable es eliminarlos de la cartera de productos, ya que tienen un bajo crecimiento y una baja participación, y pueden acabar resultando negativos para la empresa.

El ciclo de vida y la Matriz BGC

La matriz de crecimiento va estrechamente ligada con el ciclo de vida del producto, ya que cada uno de los cuadrantes representa una de las etapas. La fase de introducción corresponde al producto interrogante, la de crecimiento al producto estrella, la de madurez al producto vaca y, finalmente la de declive al producto perro.

¿Por qué realizar la matriz de crecimiento?

El marketing estratégico es una de las áreas más importantes que debe trabajar cualquier empresa para lograr que las estrategias que se quieren llevar a cabo sean exitosas. Gracias a la implementación de este modelo de análisis interno, seremos capaces de tomar decisiones sobre la inversión y gestión de la cartera de productos y de nuestras unidades estratégicas de negocio.