En qué se diferencia un máster de un Bootcamp

Los estudiantes pueden tener dificultades para decidir si quieren seguir un máster o un bootcamp. Ambas vías educativas ofrecen posibles ventajas y desventajas. Los estudiantes deben sopesar los pros y los contras de cada opción y considerar sus objetivos profesionales para tomar una decisión informada.

¿Qué es un máster?

Un máster es un tipo de formación educativa que suele ofrecer una universidad o escuela de negocios. Usualmente, son los estudios que siguen a los grados universitarios, y lo que debes saber es que existen ciertos requisitos para cursar un máster. Se trata básicamente de programas de certificación que ayudan a los estudiantes a adquirir los conocimientos y la práctica necesaria para tener éxito en un campo concreto. Usualmente, se requiere de un nivel de estudios previo para poder acceder a los mismos, y acostumbran a tener una duración de entre 9 meses y 2 años, pudiendo estudiar a tiempo parcial. La titulación que se obtiene al finalizar un máster puede abrir las puertas del futuro de cualquier profesional.

¿Qué es un bootcamp?

Un bootcamp es un programa de educación acelerada que prepara a los estudiantes para el empleo, normalmente en tecnología. Se trata pues de un curso intensivo del material que se presenta, como un lenguaje de programación específico o una faceta de la informática. Los bootcamps han ganado popularidad en los últimos años debido a la escasez de talentos en el sector tecnológico.

Sin embargo, es cierto que a día de hoy se pueden encontrar bootcamps en diferentes campos como el marketing o la dirección y administración de empresas.

1)   Duración

En el caso de las universidades, una titulación de máster puede durar entre 9 meses y 2 años, como norma general. Como la mayoría de los cursos universitarios, una licenciatura o un máster ofrece a los estudiantes la posibilidad de explorar una serie de áreas dentro de los campos a cursar. Los cursos másters requieren normalmente de una mayor inversión, tanto de tiempo como de dinero. Por otro lado, bootcamps pueden completarse generalmente en varias semanas o meses. De hecho, son modelos de formación que se caracterizan por ser intensivos y concentrar todo el temario en pocas semanas.

2)  Acceso y conocimientos previos:

Los másters universitarios te permiten profundizar en una determinada área de especialización. En otras palabras, te aportan los conocimientos necesarios para convertirte en un experto de una rama específica.

Un aspecto importante en el que los bootcamps y los másters difieren mucho es la accesibilidad. En el caso de los másters universitarios, por lo general es necesario acreditar los resultados de los exámenes de fin de carrera o realizar una prueba de acceso para ser admitido. Los bootcamps pueden ser realizados por cualquier persona interesada en el tema, y no hay requisitos académicos para acceder. Si te preguntas si los bootcamps son mejores que la universidad, normalmente depende de tus objetivos y necesidades, aunque bien es cierto que el certificado adquirido una vez se finalizan los estudios es superior en el caso de los másters.

3)  Teoría frente a práctica:

Los másters universitarios cubren una gran cantidad de información teórica en profundidad e implican tareas escritas como ensayos e informes, aunque cada vez son más las escuelas de negocio y/o universidades que incluyen prácticas en sus programas formativos. Por otro lado, los bootcamps cubren lo esencial en cuanto a conocimientos teóricos, mientras que tienen un fuerte componente práctico.

4)  Servicios de carrera:

El mundo digital cambia y evoluciona constantemente. Estar al día de los nuevos avances es esencial, y la mejor manera de hacerlo es mediante la formación continua. Aunque ambas opciones te abrirán las puertas al mercado laboral, una persona que cuente con unos estudios de máster finalizados, tendrá un valor añadido en su currículum frente a los que optan por cursar un bootcamp.

5)  Flexibilidad y ubicación:

A día de hoy, este es el aspecto que más puntos en común presenta entre ambas opciones. Y es que en la actualidad, y especialmente tras la pandemia, es muy fácil encontrar la opción de formarse tanto a distancia como de forma presencial. Lo que te aconsejamos es que mires detenidamente qué te ofrecen ambos programas formativos para que te decantes por uno u otro, ya que este punto, como puedes ver, no es decisivo.

¿Grado o bootcamp?

La mayoría de las principales diferencias entre los programas de certificados de máster y los bootcamps se derivan de la ubicación de estos programas dentro de un campo o disciplina. Los programas de certificación suelen estar vinculados a carreras universitarias, con la intención de ampliar conocimientos y especificarse en una determinada área para convertirte en un experto.

Por el contrario, los bootcamps suelen estar separados de los programas de grado, incluso cuando los ofrecen las universidades que tienen programas de grado y posgrado. Por ello, en la mayoría de los casos, los bootcamps no confieren créditos transferibles a un programa de grado. Sin embargo, como los bootcamps no suelen incluir cursos que formen parte de un programa de grado más amplio, suelen tener más flexibilidad de horarios y no tienen que ceñirse a un calendario académico tradicional.