¿Qué es el flujo de caja?

Dentro del sector empresarial, existen muchos términos y métricas que es necesario conocer para mejorar la gestión financiera de una compañía, como el flujo de caja o el cash flow.

A nivel técnico, el flujo de caja es un concepto que sirve para conocer el nivel de liquidez de un negocio, dado que hace referencia a todas las salidas y entradas de dinero de una empresa. Es decir, se trata de una herramienta que calcula la diferencia entre los ingresos y los gastos de un negocio.

Cómo calcular el cash flow

Para calcular el cash flow, se pueden emplear dos metodologías: de forma directa o a través del flujo de caja indirecto. En el primer caso, lo que habría que hacer sería restar el flujo de efectivo saliente al flujo de efectivo entrante.

Es decir, habría que consultar cuáles han sido los cobros e ingresos que se han realizado desde la empresa y restar a ese resultado el número de gastos que se haya tenido (bien sea a través de compras, pagos, deudas, etc.). 

No obstante, en el cálculo del flujo de caja de forma indirecta, lo que se hace es consultar el beneficio neto de la empresa, las amortizaciones y las provisiones, para sumar estos valores y poder calcular el cash flow. 

Ejemplos de flujo de caja

A continuación, vamos a poner un ejemplo de flujo de caja calculado de forma directa e indirecta, empezando por el primero.

Por ejemplo, si una compañía tiene un total de 300.000€ como flujo de efectivo entrante y unos 60.000€ de flujo de efectivo saliente, el resultado de la resta de ambos conceptos será de 240.000€.

Por otra parte, si utilizamos la segunda fórmula y queremos saber el flujo de cada de una empresa que tiene unos 190.000€ de beneficio neto, 40.000€ en amortizaciones y 10.000€ de provisiones, tendremos un flujo de caja de 240.000€ también, al sumar las cantidades mencionadas.

Tipos de flujo de caja que existen

En general, se suele hablar de flujo de caja positivo o negativo, en función de si el resultado es beneficioso para la empresa o no. No obstante, dado que el rendimiento financiero se puede evaluar de diversas maneras, también se pueden distinguir otros tipos de flujos de caja:

• Operativo, que es el que se genera a través de las operaciones comerciales usuales. Es decir, el capital generado por la actividad empresarial. 
• De inversión, que mide los flujos de efectivo generados a través de las inversiones en distintos activos. 
• De financiación, los que surgen de fuentes externas que financian la empresa.
• De caja libre, que hace referencia al efectivo que queda después de que la organización se haya hecho cargo de sus gastos.

Al final, no importa tanto la nomenclatura del flujo de caja como que esté bien calculado. Piensa que es un término que se utiliza desde las corporaciones empresariales para poder calcular si la compañía está siendo rentable, y la intención es que sea una métrica que ayude a guiar las decisiones empresariales. 

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